Al confeccionar el IRPF de 2022, los empresarios en estimación directa que facturan menos de diez millones de euros anuales pueden aplicar los incentivos previstos en el Impuesto sobre Sociedades para las empresas de reducida dimensión.

De este modo, al igual que sucede con dichas sociedades, si un empresario en estimación directa del IRPF adquiere activos nuevos y paralelamente aumenta su plantilla media de trabajadores, puede acogerse al incentivo de la libertad de amortización a la hora de amortizar dichos activos.

La cuantía que puede beneficiarse de la libertad de amortización es la que resulte de multiplicar el incremento de la plantilla media de trabajadores por 120.000 euros.

No obstante, para maximizar el ahorro fiscal obtenido, es conveniente actuar con cautela y seguir el consejo de profesionales especializados en la materia.